Cuando el calor fluye hacia un objeto, su energía térmica aumenta y también lo hace su temperatura. La cantidad de aumento de temperatura depende de tres cosas: 1) la cantidad de calor que se agregó, 2) el tamaño del objeto y 3) el material del que está hecho el objeto.
La energía térmica y la temperatura están estrechamente relacionadas. Ambos reflejan la cantidad de partículas de materia en movimiento en forma de energía. Sin embargo, la temperatura es la medida promedio de esa energía, mientras que la energía térmica es la energía total dentro de un sistema.
¿Significa esto que la materia con una temperatura más baja tiene menos energía térmica que la materia con una temperatura más alta? No necesariamente.